¿Qué es el amor?

Amor, cuántas cosas se vienen a la cabeza cuando pienso en esta palabra, recuerdo cuando iba al cole y una maestra nos pidió que demos la definición de amar, todos nos quedamos en silencio, hasta que tuve la gran ocurrencia de decir "amar es querer mucho a alguien", la maestra con una sonrisa me dijo, si a una persona que te dice "te amo", tu le respondes "y yo te quiero mucho", no creo que esa conversación termine bien.

A lo largo de la historia la palabra amor fue tomando diferentes significados, incluso la palabra amante fue mutando, una palabra que se usaba para referirse a la relación entre marido y mujer (son amantes incondicionales) hoy se asocia más a una 3ra persona que al matrimonio en si. 

El amor, causante de tantas alegrías y otros tantos sufrimientos, hay quienes dicen que amar es la mejor sensación del mundo, y otros al escuchar esta palabra solo les trae dolor y malos recuerdos. Es increíble pensar que una palabra a la cual no se puede describir pueda causar tantas sensaciones. 

Podemos encontrar varios ejemplos de amor, Romeo y Julieta, sherk y Fiona, el diario de Noa, incluso en Edipo(un amor un poco raro). Podemos hablar de David, que por amor a Dios y su pueblo lucho con Goliat, y con el mismo amor, en este caso a la mujer equivocada, tiró todo por la borda. Sino pensemos en Pedro que por amor a Jesús se ofreció a ocupar su lugar en la cruz, y por amor asi mismo le negó 3 veces en menos de 24 hs.

Así podemos dar una lista interminable de situaciones donde el amor se apodera de nosotros y nos hace actuar. Para bien y para mal.

Pero las preguntas a las que me llevo todo esto podrían ser ¿Que es amar? ¿Si el amor duele lo suelto? ¿Decisión o sentimiento?

Se de alguien que tiene respuestas a esto. 

Cuando leemos los evangelios podemos ver en todas las situaciones, a un Dios perfecto, amando a personas imperfectas. Pero esa forma de amar está tan alejada a la que hoy tenemos, que llegamos a pensar que si la persona que amamos no nos hace feliz lo desechamos y buscamos otro a quien darle nuestro amor.

Veamos ejemplos de amor...

El amor puede significar enfadarse y ser celoso por las causas adecuadas (Mateo 21:12-13)

El amor puede significar compasión como cuando Jesús sana un discapacitado. (Mateo 9)

El amor puede ser generosidad como cuando Jesús alimenta cinco mil.

Pero de todos los actos y formas de amar de Jesús , hay uno en particular, que me gustaría hablar hoy. 

El amor duele, ¡SI! el amor correcto, muchas veces duele. 

Cuando vamos a Lucas 22:39-46 encontramos a un Jesús dolido, un Jesús que sufre, en el v42, nos muestra que amar, como Dios nos pide, muchas veces no irá de la mano con nuestra voluntad. Por eso puedo afirmar que amar, tiene que ser una decisión y no un sentimiento. Ya que un sentimiento se dice, una decisión se hace. 

Jesús sabía lo que le esperaba y sabía lo que venía. El v44 dice que su dolor era tal, que sudaba sangre (hay una enfermedad que se llama hematidrosis, que el cuerpo mezcla sudor con sangre y esto es ocasionado por una situación de extremo estrés). El estrés de Jesús no era por los látigos o por la corona de espinas, su estrés era porque tenía que elegir entre su sentimiento de amor o su decisión de amarnos hasta el final. Por suerte decidió ir hasta el final, se entregó a pesar de que eso significaría sufrir el abandono de su padre en la cruz justo en el momento donde el pecado lo invade. 

Después de analizar este gran acto de amor es inevitable plantearme varias cosas.

¿Yo reflejo ese amor?

Somos seres diseñados para amar y ser amado, pero quizás la vergüenza o el dolor no nos dejan amar como se debe. Quizás por alguna tonta razón nos sentimos moralmente superior o inferior a otros y eso nos dificulta amar.

Itiel arroyo escribe en su libro Amar es para valientes: 

Si no hay amor, no hay unidad, y si no hay unidad la iglesia pierde credibilidad frente al mundo.

Vayamos a la esencia y seamos seres que aman, amantes de las personas a pesar de su condición, raza o religión. 

Miremos y decidamos amar como Jesús.

Recuerda esto sólo es una decisión.

Imagen Jean-Michel Basquiat - Two heads on Gold 1982